Convertir tu baño en un espacio tranquilo inspirado en un spa no solo quedará genial, también te sentará estupendamente. Te enseñamos a lograrlo en tu propia casa

 

Los spas representan la relajación total, no solo gracias a los masajes corporales y faciales, sino por la experiencia completa. Desde los aromas hasta los colores relajantes, entrar en un spa aporta una sensación de liberación. Buena parte de la experiencia consiste en que sabes que el tiempo que vas a pasar allí estará dedicado en exclusiva a mimarte.  

 

De igual manera, tu cuarto de baño es como un santuario privado. Un momento del día que realmente te dedicas a ti. Ahora, transformar tu baño en un minispa privado y disfrutar de una experiencia profesional en casa es más fácil que nunca. Sigue leyendo para descubrir nuestros siete sencillos pasos para crear un spa en casa.  

 

Paso 1: Usa colores relajantes 

Intentar relajarse en un baño de color rosa fucsia con una cortina estampada puede resultar complicado. Alcanzar la tranquilidad será más sencillo con unos pequeños cambios. Puedes empezar por incorporar colores relajantes. Según un estudio reciente, el azul marino es el color más calmante de todos. “Se ha demostrado que los azules y los verdes están vinculados con una sensación de relajación y un menor estrés, quizá porque se parecen al océano y nos recuerdan a la naturaleza. Por eso son una opción estupenda para lograr un baño sereno y relajante”, afirma Stephane Piazza, responsable de Decoración de Interiores en Apt London. “Creo que quedan estupendos en toda la pared, pero si eso te parece demasiado, puedes usarlos solo en una mitad, con pintura o paneles, y puedes usar un tono más neutro en el espacio superior. O también puedes usar esos colores en detalles pequeños como en una de las paredes o alrededor de la puerta”.  

 

Paso 2: Detalles que recuerdan al spa 

Si te tapan los ojos y te llevan a un spa, lo reconocerías solo por los aromas que te rodean.  Desde las velas de la sala de espera hasta los aceites aromáticos de las salas de tratamientos. Los aromas tienen un papel fundamental a la hora de lograr un entorno calmante. Puedes optar por un aroma cítrico en la cocina o un toque almizclado en el salón, pero está claro que los spas tienen una fragancia inconfundible para inducir un estado de calma. “Uno de los aromas más populares para crear un ambiente relajante es la lavanda”, dice el experto en diseño de interiores Kane Hughes. Según distintos estudios, la lavanda tiene un efecto calmante e incluso se usa en medicina para tratar la ansiedad, por lo que es una excelente elección para relajarse. Tanto las velas como las barritas aromáticas son una excelente manera de repartir la fragancia por todo el espacio, pero para crear una sensación aromática completa, es bueno invertir en un difusor electrónico. 
 

Paso 3: Sonidos de spa 

Nada mejor para empezar a relajarse que la música suave y meditativa. Por eso prestar atención a lo que se escucha en el baño es tan importante como elegir cuidadosamente su decoración. Si lo que quieres es relajarte, elige canciones suaves y sin letra, que te hagan sentir como si estuvieras flotando. Para llenarte de inspiración fácilmente, hemos creado varias listas de reproducción relajantes en nuestro canal de Spotify que son perfectas para relajarte en el baño.  

Paso 4: Reduce la intensidad de la luz 

Ningún spa que se precio tiene una iluminación agresiva e intensa, porque los ambientes de luz baja ayudan a relajarse. Si tienes un interruptor que permita graduar la intensidad de la luz, úsalo para lograr el ambiente más oscuro posible y al mismo tiempo ver lo que estás haciendo. Las velas son obligatorias, claro. Alrededor de la bañera coloca velas pequeñas como las minivelas aromáticas Private Collection Suede Vanilla que, además de caber perfectamente, se apagarán de manera automática. En el resto de la habitación, coloca velas más grandes con aromas sensuales y relajantes como la vela aromática Private Collection Black Oudh. 

 

Paso 5: Cada cosa en su sitio 

Puede parecer poco lógico ponerte a ordenar las cosas antes de relajarte, pero si tienes el baño lleno de ropa por colocar, juguetes de los niños o cualquier otro elemento que cree desorden, te va a costar desconectar. Mientras se llena la bañera, dedica unos minutos a ordenar para que cuando te sumerjas en el agua lo único que tengas en mente es tu relajación. 

 

Paso 6: Más que un baño 

Darse un baño no será lo mismo sin burbujas. Además de divertidas, te ayudarán a suavizar la piel. Si quieres aprovechar el baño para cuidar al máximo el cuerpo, combina las burbujas con unas sales de baño para hidratarte a fondo y relajar los músculos. La espuma de baño The Ritual of Sakura y los cristales de magnesio The Ritual Of Jing son la combinación perfecta.  

 

Paso 7: La importancia de las toallas 

No hay nada más típico de un spa que unas toallas suaves, así que si las que tienes ahora mismo necesitan un cambio, elige unas de suave algodón que te sienten tan bien como un abrazo cada vez que las uses. Las toallas además son una manera estupenda de jugar con el color del baño si tener que hacer cambios a largo plazo. “Mezclar los colores de una misma paleta tonal es una manera perfecta de dar un toque interesante a los baños que resulten aburridos”, afirma Piazza. “Los tonos neutros de gris claro y oscuro son perfectos para los baños blancos, pero los tonos azules y verdes también son una buena opción”.   

 

Este artículo forma parte de la serie House of Wellbeing, centrada en ayudarte a convertir tu hogar en un refugio de bienestar. Son artículos llenos de datos de expertos y consejos prácticos pensados para ofrecerte todo lo que necesitas para llenar tu casa de serenidad, calma y alegría.