Abigail James vive en Londres y conoce los secretos para una piel radiante. Con más de 10 años en la industria de la belleza, su libro Love Your Skin (ama tu piel) ha sido aclamado como la mejor guía para una tez luminosa. Hablamos con ella sobre su inspiración, su enfoque para el cuidado facial y las cosas que debes hacer para lograr una piel sana y bella.

Eres muy conocida en la industria. ¿Cómo y por qué elegiste una carrera en cuidado facial?

Originalmente estaba en el negocio de alimentos de mi familia, después de tener mi primer hijo a los 23 me capacité como terapeuta. Necesitaba un cambio de vida, así que estudié terapia de belleza en la escuela nocturna durante 2 años. Comencé con la belleza y estudié muchas formas de masajes corporales, técnicas holísticas, masajes para madres y bebés y métodos de masajes faciales. Seguí aprendiendo sobre métodos holísticos y técnicas más avanzadas y me apasionaron los productos para el cuidado facial, lo que hizo que me volviera más especializada en ese campo.

Eres conocida por tus manos curativas y tu concepto "piel vibrante, vida vibrante". ¿Puedes contarnos un poco sobre esto?

Cuando estaba estudiando terapia de belleza, mi entrenamiento me dio un enfoque verdaderamente holístico de la piel y la salud, respetando el poder de la energía positiva. Los métodos que aprendí de trabajar en músculos, vasos y tejidos del cuerpo los llevo al trabajo en el rostro. 

A lo largo de los años, he aprendido de muchos clientes, que la piel puede responder visiblemente al estrés y que solo podemos llegar hasta un punto con los productos. A menos que trabajemos nuestros niveles de estrés y estilo de vida y veamos todo el cuadro, los resultados serán limitados.

Hablando de productos, ¿puedes explicar las principales diferencias entre el cuidado facial mayormente natural y el que usa muchos químicos?

El cuidado facial natural utiliza ingredientes de la naturaleza: ya sean plantas, flores, minerales o esencias. Es posible que aún se extraigan y tengan que someterse a un proceso científico para convertirse en el producto final, pero generalmente son ingredientes que tu cuerpo reconocerá más naturalmente y, por lo tanto, es menos probable que causen una reacción. Son amigables con nuestra salud.

Los productos de cuidado facial hechos con muchos químicos sintéticos no usan ingredientes de la naturaleza. La mayoría han sido creados en un laboratorio con ingredientes sintéticos, colores, fragancias y conservantes. El cuerpo no tiene una sinergia natural con ellos, por lo que es más probable que la piel reaccione negativamente. Muchos son conocidos como irritantes de la piel.

Además de los productos, ¿qué tipo de cosas deberíamos tener en cuenta en nuestra rutina diaria para lograr una piel sana y radiante?

Una dieta balanceada. Aumenta la cantidad de verduras frescas, frutas y nueces y reduce los estimulantes como la cafeína, el alcohol y el azúcar refinada. Sal al aire libre y respira. ¡Muévete! No necesitas ir al gimnasio; puedes caminar, hacer yoga, andar en bicicleta o nadar. Mantente hidratado, no solo con agua, sino también con infusiones de hierbas y aguas naturales de plantas como el coco o el abedul. Puedes hacerte un masaje facial en casa todos los días. Y por último, dedícate un tiempo para ti, mantener sana tu salud mental es esencial.

Esos son todos excelentes consejos. Por el contrario, ¿qué deberíamos evitar para garantizar una piel sana?

Fumar. Entre tantas otras cosas negativas, restringe el flujo de sangre a la piel, lo que reduce los nutrientes. Esto hace que la piel envejezca rápidamente y se vea opaca.

No limpiar la piel por la mañana y por la noche. No hacerlo es realmente un gran error. Por sí solos, el agua y el jabón secan la piel. Usea un limpiador por la mañana para que el resto del cuidado facial lo realices sobre una superficie limpia, y hazlo nuevamente por la noche así tu piel pueda pasar por su proceso natural de regeneración mientras duermes.

Deberías evitar la exposición excesiva al sol. Envejece dramática y prematuramente la piel.

También evita los alimentos procesados. Somos lo que comemos, y eso va para nuestra piel también.

Algunas personas dicen que la buena piel es gracias a buenos genes. Si tienes problemas en la piel, ¿siempre se pueden remediar con rutinas específicas de cuidado facial?

La genética juega un papel importante, sin embargo, nuestro entorno, estilo de vida y opciones de productos tienen un gran impacto en la salud de nuestra piel. La piel con problemas necesita más atención y cuidado constante más que una solución rápida.

Eres una gran defensora del masaje facial: ¿cuáles son los principales beneficios?

Wow, ¡hay tantos! Reduce la tensión facial, suavizando los contornos faciales y haciendo que la cara luzca relajada. Aumenta la circulación, aportando nutrientes frescos a todo el tejido facial. También aumenta la circulación linfática, que es responsable de eliminar las toxinas. Esto da como resultado una tez más luminosa, eliminando el exceso de líquidos y la hinchazón. Cuando utilizas métodos específicos, el masaje facial tiene la capacidad de darte un efecto lifting y afinar el contorno, haciendo que tu piel se sienta y se vea más juvenil.

También tiene un impacto en la felicidad. Cuando trabajas en la cara y la cabeza, creas un estado meditativo que es maravilloso. Creo que el músculo tiene más que solo memoria física. Creo que también tiene una conexión emocional. Expresamos muchas emociones con nuestra cara; cuando masajeamos estos músculos ayudamos a liberar y aliviar nuestras emociones.

¡Definitivamente nos has convencido! ¿Hay algún otro consejo que le darías a las personas que ahora prestan cada vez más atención a su rutina de cuidado facial?

Como dije antes, la limpieza es primordial mañana y noche. Los serums son el motor de la rutina y deben aplicarse después de la limpieza. La hidratación es la manta reparadora y la nutrición que es esencial para mantener la piel bien hidratada y con esa increíble sensación de confort.

Muy bien, gracias. Por último, ¿tienes algún secreto que puedas compartir con nuestros lectores para mantener una piel hermosa?

Agua fría: proporciona un impulso instantáneo. Tapa tu cara con un paño húmedo y sostenlo por un rato. Las mascarillas dan un brillo inmediato, haciendo que la piel se sienta y se vea flexible e hidratada. Siempre tengo 2 tipos diferentes de limpiadores. Los faciales no son exactamente un secreto, pero los incorporo a mi rutina de belleza una vez cada 6 semanas. Finalmente, trata de tener al menos 1 día sin maquillaje a la semana. Me encanta usar un aceite facial en estos días para darle un respiro a la piel.