La apicultura: una manera consciente de cuidar el planeta

Aunque son más conocidas por su deliciosa miel y sus inconfundibles rayas, las abejas tienen un papel crucial en el ecosistema global. Alrededor de un tercio de la comida que disfrutamos todos los días depende de la polinización de las abejas y, aún así, estos insectos se encuentran cada vez más amenazados.

 

Desde los aguacates y los arándanos hasta las almendras, los cítricos o la soja, muchos de los alimentos que comemos y los cultivos de los que dependemos requieren polinización. Pese a que algunas aves, murciélagos, mariposas y otros insectos juegan también un papel en este ciclo natural, las colonias de abejas se encargan de una enorme parte del trabajo. Por desgracia, las poblaciones de abejas en todo el mundo están disminuyendo considerablemente. En Europa, se cree que el 10 % de la población de abejas está en peligro.

 

Si bien los cambios en el clima y el uso de ciertos pesticidas nocivos también contribuyen al declive de las abejas, una de las principales causas es la pérdida de hábitats naturales para las abejas silvestres. Y ahí es justo donde entra en juego la apicultura. Las colmenas bien administradas y cuidadas son un salvavidas fundamental para aumentar el número de abejas y mantener unos niveles de polinización altos. La buena noticia es que las colmenas se pueden poner en casi cualquier lugar, siempre que las abejas disfruten de un lugar cálido y protegido para prosperar y tengan acceso a plantas con flores.

 

¿Quieres ayudar a las abejas? Sigue estos consejos para principiantes de la apicultura.

 

1. Haz los deberes

Hay mucho que aprender sobre cómo cuidar bien de las abejas, por lo que investigar es fundamental. "El mejor consejo para alguien que quiera involucrarse en la apicultura es que aprenda todo lo que pueda antes de tener abejas", dice Amanda Johnston, una apicultora a tiempo completo que se graduó recientemente del programa de formación de Rowse Bee a Bee Farmer. “Es esencial contar con la experiencia práctica de otros apicultores, para saber si te gusta o no. Un dicho común en la apicultura es: 'las abejas no siguen el manual', así que por mucho que leas, las abejas siempre te sorprenderán".

 

2. Conecta con apicultores locales

La comunidad apícola es muy amable y estará llena de consejos y experiencias, por lo que Johnston aconseja entrar en contacto con una asociación apícola local para dar tus primeros pasos. "Es una manera estupenda de conocer a otros apicultores, ver las colmenas y obtener todo tipo de consejos generales sobre apicultura y el equipo que necesitarás", explica. Muchos también organizan días de puertas abiertas y cursos para principiantes a los que puedes inscribirte para obtener una información muy valiosa.

 

 

3. Prepara el equipo

Si vas a empezar desde cero, deberás invertir en algunas herramientas de apicultura esenciales, la más importante: la colmena. Las colmenas modernas tienen marcos móviles que ayudan a proteger a las abejas de los daños durante las inspecciones, el mantenimiento o la recolección de la miel. También necesitarás un buen par de guantes y un velo para protegerte la cara de las picaduras. Un traje completo puede proteger el resto del cuerpo de las picaduras de abeja ocasionales, pero con usar ropa larga es suficiente.

 

4. Crea un refugio para el polen

¿Ya tienes preparada la colmena? Antes de traer las abejas, puedes crear un refugio de polen durante todo el año. "El néctar no es solo para el verano, las abejas y otros insectos polinizadores también lo buscan en otras épocas del año", dice Michael Perry, experto en jardinería de Rowse. “Las fuentes de néctar en primavera pueden ayudar a los polinizadores a repostar después de su período de hibernación, y en otoño pueden ayudarles a acumular reservas de energía para los meses venideros.  No te olvides de plantar teniendo en cuenta una gama amplia de períodos de floración, para que la vida silvestre nunca pase hambre".

 

5. A por las abejas

Una vez que esté todo preparado, toca comprar las abejas. Aquí también puedes escuchar las recomendaciones de tu asociación local, ya que las abejas locales ya están adaptadas a tu zona y es más probable que prosperen. Por lo general, las abejas vienen como un "núcleo" que contendrá una abeja reina junto con algunos cuadros de abejas ya establecidas, crías (larvas en crecimiento) y alimento.  Como principiante, es mejor comenzar con algo pequeño y aumentar el número de abejas y el tamaño de tu colmena a medida que adquieras más experiencia.

 

6. Un jardín en la azotea

¿Tienes un espacio limitado? Los jardines en las azoteas son cada vez más populares en las áreas urbanas y, si se planifican teniendo en cuenta las plantas cercanas aptas para las abejas, a menudo pueden ser mucho más útiles que las grandes extensiones de verde donde crecen pocas plantas con flores.  Puede que primero debas hablar con tus vecinos sobre tus planes, pero los jardines en la azotea pueden ser un buen lugar para las abejas, siempre que haya un rincón cálido y protegido para colocar la colmena.  ¿Te gusta la idea de una azotea más verde? Descubre cómo crear un jardín en tu azotea.

Amy Lewis

Amy Lewis

Amy Lewis es una editora de belleza del Reino Unido con más de 12 años de experiencia escribiendo para webs y revistas, como Marie Claire, Stylist, Who What Wear y Byrdie. Le apasiona todo lo relacionado con el cuidado de la piel, el bienestar y los viajes, y darse un baño es uno de sus pasatiempos favoritos.