Tsukimi: la tradición japonesa otoñal de la luna llena

Una creencia muy extendida afirma que la luna tiene una energía y un poder espiritual que podemos aprovechar en la tierra. Su fuerza gravitatoria afecta a las mareas de los océanos y el reflejo de la luna llena ilumina por completo el cielo nocturno. En Japón, hay una ceremonia anual dedicada a la luna llamada Tsukimi, que literalmente significa "observación de la luna". Es el equivalente otoñal de Hanami, la fiesta de la primavera para ver los cerezos en flor. Las familias llevan cientos de años celebrando esta luna llena. Esta celebración es una oportunidad para demostrar gratitud y respetar la luna, dar las gracias por una cosecha abundante y pedir más cosas positivas en el futuro.

 

La tradición Tsukimi

Tsukimi es una tradición que se remonta a los aristócratas del período Heian en Japón (del 794 al 1185), que solían admirar el reflejo de la luna en el agua y leer poesía. Se cree que se inspira en el Festival de Otoño chino. A lo largo de los años ha evolucionado desde las fiestas nocturnas del período Edo (del 1603 al 1868) a lo que es en la actualidad, algo más parecido a lo que fue originariamente: un momento profundamente contemplativo, casi solemne, para reflexionar, agradecer y rezar al dios lunar pidiendo buena salud.

 

Tsukimi

La noche de la luna llena (generalmente entre mediados y finales de septiembre, este año será el 1 de octubre), la gente se reúne en familia o en pequeños grupos en un lugar donde la luna se vea bien en el cielo nocturno, conocido como el “tsukimidai”. A menudo, se lleva a cabo en el engawa (porche) o en el jardín. El espacio está decorado tradicionalmente con hierba de las Pampas, conocida en Japón como “susuki”. Esta hermosa y elegante planta se usa como una ofrenda a la luna y representa la generosidad de las plantas de arroz. Después de la fiesta, la hierba de las Pampas se guarda dentro de casa y se dice que puede prevenir enfermedades.

 

Comida Tsukimi

Dado que el objetivo del festival es dar las gracias a la luna por una cosecha abundante y buena salud, la comida actúa como ofrenda y todos los que se reúnen la disfrutan. Los Tsukimi-dango, o dumplings de arroz para ver la luna, son una parte fundamental de la ocasión y se suelen colocar en forma de pirámide. Alimentos de temporada como las castañas y la batata, así como el mochi (un pastel de arroz dulce), el edamame y el sake (una bebida alcohólica japonesa, parecida al vino, elaborada mediante la fermentación del arroz) se colocan bajo la atenta mirada de la luna, para disfrutarlos y compartirlos con el dios lunar.

 

El conejo en la luna

A nosotros nos suena la historia del hombre en la luna, pero en Japón se cree que esta está habitada por conejos y que, si miras de cerca, puedes ver uno golpeando el mochi para darle su textura particular. Los conejos aparecen con frecuencia en las ceremonias de Tsukimi y en las obras de arte que representan la celebración a lo largo de los años.

 

Tu momento con la luna

La felicidad está muy ligada a la gratitud y, como indica la ceremonia de Tsukimi, deberíamos dar las gracias más a menudo. Transforma esta luna llena en una ocasión para hacer una pausa, ver la luna, darte un baño o estirar y pensar en todas las cosas por las que puedes dar las gracias. Pero podemos dar las gracias más de una vez al año. Descarga una aplicación de ciclo lunar como My Moon Phase para ver cuándo estará llena la luna cada mes y anótalo en tu diario.

 

Dar las gracias por las cosas buenas, por pequeñas que sean, te ayudará a ver que, en esta vida, hay mucho por lo que estar agradecida. Escribe en un diario aquello por lo que estás agradecida y, cuando tengas un día estresante, haz una pausa para reflexionar y consultar esa página.

 

Aquí puedes descubrir más cosas sobre cómo usar el ciclo lunar para llevar una vida con alma.